Esa mañana Adriana entró a su apartamento sin más ambiciones que seguir viviendo la costumbre de su matrimonio. Cerró la puerta y notó que algo era distinto: el aire tenía notas de mandarina, de caramelo claro, de piel de durazno, con una acidez brillante y cuerpo medio. El aroma era violento y escandaloso, extraño y sensual, y envolvía cada rincón del apartamento. Era el aroma del café del Huila, recién molido y preparado, servido en una sola taza que estaba sobre la mesa del comedor, en el puesto de Mario, quien no esperaba que Adriana volviera tan rápido del supermercado. Rodeados de un ruidoso silencio y deslumbrados por el sol de septiembre, los esposos, incómodos y confundidos, entrecruzaron sus lejanas miradas, como dos amantes dedicados a desamarse hasta que la muerte los separe.
—¿Quieres?
—No.
Algo había fracturado la costumbre. A Mario le extrañó la actitud de Adriana. Adriana había comenzado a odiar el café.
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Autor: Baltasar Botarava (Bogotá, Colombia, 1987). Economista y magister en Economía; se ha desempeñado como funcionario del Ministerio de Defensa Nacional de Colombia y como profesor de la Escuela Colombiana de Ingeniería y de la Universidad de los Andes, en Colombia. Actualmente, es vicepresidente del Capítulo de Economía de la Asociación de Egreados de la Universidad de los Andes. Sus creaciones literarias han sido publicadas en Primera Página.