Fotografías de Santiago López Peralta
El psicoanalista inglés Adam Phillip propone la idea de que todos vivimos simultáneamente dos vidas en paralelo. Está, por un lado, la vida que desarrollamos de manera activa y, por el otro, nuestra vida deseada. Esta segunda vida es una fantasía de nosotros mismos con la que convivimos incesantemente. Se compone, la segunda vida, de los mitos que nosotros mismos creamos sobre nuestro propio potencial y fantasea con los lugares que pensamos podríamos estar ocupando. Cuando la vida activa se ve afectada por la adversidad, invariablemente nos refugiamos en la otra vida, en nuestra quimera personal.