Después de las primeras horas de camino el paso disminuye con tranquilidad. La respiración se agita para después aminorarse hasta ser apenas un susurro imperceptible. Los brazos pesan y las piernas se aletargan. La espalda […]
Después de las primeras horas de camino el paso disminuye con tranquilidad. La respiración se agita para después aminorarse hasta ser apenas un susurro imperceptible. Los brazos pesan y las piernas se aletargan. La espalda […]