¡Cojone! Corre, pon la linterna del móvil, que alumbre el cuarto de la niña, tú sabes que se despierta enseguida cuando se ve a oscuras…
¿Y… qué hora es, eh…? Mira esto, chico, el arroz blanco que lo acabo de montar en la olla arrocera… ¿Qué tú crees, pongo la cazuela en el fogón de gas? ¿No se romperá por eso…? Oye, ya se despertó la niña. Claro, si hace tremendo calor. Anda, cógela a ver si yo logro terminar la comida. ¿Niño, y qué hago de plato fuerte?