«Los iluminados»: El cuestionamiento y la exigencia moral

Hablar sobre temas religiosos, en muchas ocasiones, genera una polarización importante. El dualismo cartesiano nos lleva a pensar en una postura «a favor» o «en contra». No obstante, la complejidad del tema puede provocar una discusión interminable sobre los argumentos de ser afín a una u otra postura. La moral, en todo caso, se presenta siempre como materia central que puede ser, finalmente, una disyuntiva fundamental en la decisión humana. Un ejemplo de este tipo crudo, fuerte y un tanto polémico, presenta Los iluminados (Les éblouis, en francés) (2019), película dirigida por Sarah Suco y que formará parte del próximo Tour de cine francés.

La pequeña Camille (Céleste Brunnquell) es una joven apasionada con su escuela de circo. No obstante, la repentina inclusión toda de su familia —junto a sus dos padres y sus tres hermanos menores— en una comunidad religiosa cambiará sus vidas. A partir de ese momento, la convivencia familiar se verá afectada por la normativa y la obediencia que exige la comunidad. Camille experimentará, poco a poco, las consecuencias de su nueva forma de vida, por lo que buscará salvar a sus hermanos del aislamiento y la complejidad de pertenecer a esta congregación religiosa.

Uno de los elementos que otorga mayor verosimilitud a la película —sin incluir las cercanías temáticas con la realidad— es la actuación de Céleste Brunnquell, quien encarna a la protagonista de la cinta. Su interpretación crece en la medida que el filme desengarza su historia, de modo que las escenas finales presentan a una joven realmente desgastada, afectada y desesperada por su forma de vida, además de la afectación directa a sus hermanos. En este sentido, se convierte en una especie de personaje «imantado» de otros personajes, quienes a su vez se desenvuelven en una dinámica propia, con sus particularidades y problemas o motivaciones.

Es en este punto, donde contrasta notablemente la madurez de los involucrados, principalmente por la desemejanza entre sus padres (Camille Cottin y Éric Caravaca) y Camille. Sus oposiciones muestran un grado de responsabilidad distinto que, en principio, pareciera cargarse hacia las obligaciones de los adultos, aunque en los hechos es Camille quien toma tales deberes. Así, desde el principio de la historia surge un dilema o una encrucijada entre la ética y la moral, simbolizada por el seguimiento de las tradiciones y «virtudes» de la comunidad religiosa.

El efecto moralista que propicia la comunidad pareciera saciar o llenar las necesidades familiares de Camille —o de sus padres, más bien—, por lo que el nudo de la historia se focaliza en el conflicto de pertenecer o no pertenecer a dicha comunidad. Nuevamente, el dilema dual aparece enfocado desde otra perspectiva.

Películas como El joven Ahmed (Jean-Pierre y Luc Dardenne, 2019), por ejemplo, abordan el tema del fanatismo religioso. Sobre este propósito, Los iluminados también tocan este punto, aunque desde una perspectiva colectiva, la cual propicia y genera un sentido de pertinencia, así como vínculos más profundos por reconocerse en las mismas personas conformantes de la comunidad. A diferencia de la cinta de los Dardenne, el fanatismo aquí no parte del conflicto personal, sino más bien de las consecuencias de ese mismo fanatismo que surge de las inmoralidades y faltas desde lo colectivo.

Así, la película llega al punto gélido en su cierre, que además puede provocar polémica en el público al generar una impresión fuerte, pues la situación o el conflicto transgrede directamente al ser llevado al punto de la sensibilización y la falta ética. Es por esta razón que la cinta de Sarah Suco se presenta como una película muy particular de la muestra de cine francés de este año.

Los iluminados se estrenará en salas el próximo ocho de octubre. Es una opción interesante por la crudeza de su propuesta que, si bien toca temas fuertes, no cae en el morbo o en el exhibicionismo de las faltas religiosas, éticas y morales. En este sentido, la cinta resulta sumamente crítica hacia las acciones dolosas de las comunidades de este tipo. No te la pierdas.