A finales de los setentas del siglo XX comenzó la liberación sexual y el tema del cuerpo femenino tratado por las autoras empezó a asomarse en la poesía mexicana, con mayor o menor fortuna estética, reclamando un territorio como propio. Esta paulatina recuperación de lo corporal se dio de diversas maneras no sólo desde el erotismo, sino también manifestando las preferencias sexuales no heteronormadas, así como expresando la sexualidad desde el empoderamiento. Estas y otras inquietudes convergen en Las cuerpas (2022) de Tania Jaramillo publicado por Malpaís Ediciones.